Hoy será el último día de nuestro Camino. Era lo que habíamos programado, seis días y dejarlo, es posible que volvamos en próximos años. Alba, que estuvo a punto de abandonar días antes, ahora se encuentra muy bien físicamente, podríamos continuar pero, habíamos pactado acabar en Logroño y así salimos decididos a hacerlo.
Salimos de Los Arcos temprano para aprovechar que la temperatura era suave, antes de que comenzase a picar el sol. Una primera subida y después un largo tramo en llano nos llevan a Sansol, a unos siete kms, y paramos a almorzar.
A un escaso kilómetro está Torres del Río, bonito pueblo, situado en alto. Seguimos un tramo muy largo, de sucesivas subidas y bajadas pero de una extraordinaria belleza paisagística, hasta llegar a la carretera que nos lleva al bello pueblo de Viana,el último de la Comunidad de Navarra, antes de entrar en La Rioja.
La etapa está siendo dura, debido a la alta temperatura y a los contínuos cambios de nivel. Paramos a tomar un aperitivo y decidimos dar por finalizado nuestro Camino, Logroño está todavía lejos. Alba y Feli vuelven en autobús a Los Arcos para recuperar el coche y yo sigo caminando, nos encontraremos en el hotel.
Por la tarde-noche, ya relajados, salimos a cenar a la famosa calle Laurel que, aunque era día laborable, estaba muy animada. La cena, como ya es clásico cuando pasamos por Logroño, fue a base de pinchos y unas cervezas. Al día siguiente, cansados pero muy contentos, vuelta a casa, a Canovelles ( Barcelona ).
Ha sido una semana muy completa, hemos caminado unos 130 kms., no hemos tenido ninguna lesión, ni siquiera las temidas ampollas, y hemos disfrutado un montón. Ha sido un Camino especial.
Saludos y Buen Camino.
Antonio R.
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