dilluns, 29 d’agost del 2016

Marxa Borges Blanques - Montblanc, 51 Kms. 28-08-2016






    Ya hacía tiempo que no participaba en una caminada larga y esta, que va de Borges Blanques a Montblanc, de 51 kms., era la que se adaptaba a mis pretensiones, con un recorrido teóricamente fácil, aunque luego veremos cómo se complicaba al final.
    A las 5 de la mañana salíamos en coche de casa, ya que la salida era a las 7 y, entre Canovelles y Borges Blanques, hay una buena tirada de kms.






     Acababa de amanecer cuando tomamos la salida unos 250 participantes, unos corriendo y la mayoría caminando, eso sí, a un buen ritmo; aunque teníamos tiempo suficiente por delante para acabar la prueba, había que aprovechar ahora que estábamos frescos y el camino lo permitía.
    Llegamos a L'Albi donde tenemos un avituallamiento variado y completo, el anterior había sido muy suave. Algunos aprovechan para reponer fuerzas, pero la mayoría nos damos prisa y otra vez a caminar.





    Seguimos por un camino ligeramente ascendente con algún tobogán suave, pasamos por Vilosell, donde hay otro control y avituallamiento. Aquí sí hubo gente que paró más tiempo, los kilómetros y el calor comenzaban a hacer mella. Yo no me entretuve demasiado y continué a buen ritmo. Hubo un momento en que pensé que me había perdido, delante de mí no había nadie, pero al poco tiempo vi una cinta de señalización y respiré tranquilo.
    Estuve caminando solo más de una hora, el grupo se había descompuesto, los corredores estaban muy lejos y los que venían detrás se lo tomaban con calma.






     Por fin divisé a lo lejos un grupo, esto me alegró y aligeré el paso, llegando con ellos a Vimbodí, el reloj del ayuntamiento marcaba las 13 horas. Un poco más adelante, en la ermita de la Mare de Deu dels Torrents, km. 35, nos esperaba otro avituallamiento, completísimo y almuerzo incluído, que fue acogido con mucho deseo, el calor apretaba, suerte que durante gran parte del recorrido soplaba una ligera brisa que nos refrescaba y nos animaba a seguir.
    Aquí la parada fue larga, comimos y bebimos en abundancia. Algunos dieron por finalizada la marcha en este punto, era una posibilidad que se les ofrecía a los que no estaban preparados para hacer la caminada completa.






    A partir de aquí se complica el recorrido. Primero una larga subida nos "ayuda" a hacer la digestión, después una bajada que nos conduce al recinto del Monestir de Poblet, para pasar por un nuevo control.
    Seguimos en ligero ascenso y, tras varios kilómetros, llegamos a un punto donde empieza la primera ascensión importante del día. Yo, al igual que más de uno, tuve que parar varias veces para tomar aliento.     Llegamos arriba y un rápido descenso nos lleva a la ermita de la Santísima Trinitat, reponemos fuerzas en el avituallamiento, bebida básicamente, y comenzamos el ascenso a la ermita de Sant Joan.
Hacía tiempo que yo no "sufría" tanto en una subida, fueron unos dos kms.de ascensión y un nivel bastante elevado. Volví a parar con frecuencia, ahora más cansado que nunca y casi extenuado llegué a la ermita, donde estaba situado el último avituallamiento. Bebí agua, coca-cola, aquarius...y paré unos cinco minutos.






    Como ya me ha pasado en alguna otra ocasión, se me agotó la batería del móvil y no puedo ofreceros las  fotos de las impresionantes vistas que se percibían desde arriba.
    Ya sólo quedaba un largo y peligroso descenso de unos 2 kms. que nos llevaba a la entrada de Montblanc. Poco antes de las 5 de la tarde, llegaba, ya algo recuperado, al Convent de Sant Francesc, final de la caminada.
    Otro gran avituallamiento, aunque yo no comí nada, sólo agua y líquidos, cerveza incluída, y rápido para casa en el coche de apoyo, que conducía Feli.






    Saludos.
    Antonio R.