Camino de Santiago Aragonés. 5ª etapa, Monreal - Puente la Reina ( 31 kms.) 07-09-2015

    Salgo de Monreal temprano, a las siete de la mañana, dispuesto a "afrontar" el último tramo del Camino Aragonés. A diferencia de otros días, hoy se pasa por muchos pueblos, todos ellos muy pequeños y casi deshabitados, pero de una gran belleza. Esto hace que la etapa resulte muy entretenida.

    Tras casi tres horas caminando, llego a Tiebas, donde tenía previsto desayunar, ya que en los pueblos anteriores no había donde hacerlo. Como me ha pasado en más de una ocasión, el único bar del pueblo estaba cerrado por ser su día de descanso. Pregunto a un señor si había posibilidad de comer en algún otro sitio y me dirige a una piscina que estaba en las afueras. No pude comer  un bocadillo, como era mi intención, porque el panadero de reparto no había llegado aún, y eso que eran las diez de la mañana, pero sí un café con leche y dos magdalenas.

    Reanudo la marcha y ya no paro más hasta llegar a la iglesia de Santa María de Eunate. Allí me esperaba Feli y también Pepe, que iba caminando por delante de mí. No pudimos entrar adentro porque estaba cerrada, en verdad hoy no era mi día de suerte. Estuvimos un rato admirando, aunque sólo fuese por fuera, la maravilla arquitectónica que teníamos ante nuestros ojos.

     Seguimos caminando, ahora juntos Pepe y yo y muy pronto llegamos a Obanos, precioso pueblo donde confluyen los dos Caminos, el Francés que viene desde Roncesvalles y el Aragonés, que empieza en Somport. Cambia el panorama automáticamente, hasta aquí sólo había coincidido con unos pocos peregrinos, pero ahora aumenta considerablemente el número de ellos, estamos en el Camino Francés, el más transitado de todos los que llevan a Santiago.

    Tras una hora de plácido "paseo", llegamos a Puente la Reina, el final de mi andadura. Comemos en un restaurante a la entrada del pueblo, un buen buffet libre a un módico precio, acompañados de Pepe, el maratoniano de Cádiz. Fue una comida un tanto especial, con una sobremesa larga y emotiva. Nos despedimos de Pepe, él seguirá el Camino hasta Logroño y nosotros volvemos a casa.

      Han sido cinco días espléndidos, bonitos parajes, buena climatología, pueblos preciosos.....Como siempre, y esto nos pasa a casi la totalidad de los que hacemos el Camino, sentimos alegría por acabar nuestra aventura, pero a su vez pena, porque nos gustaría seguir disfrutando del Camino.

    Saludos y Buen Camino.
    Antonio R.