Recordaréis los lectores del blog que, cuando hacía el Camino Aragonés, en la etapa de Sangüesa a Monreal, opté por no pasar por la Foz de Lumbier. Pues bien, cuando volvíamos a casa, paramos con la idea de conocer este paraje porque entendíamos que valdría la pena.
El circuíto más interesante consta de unos dos mil cuatrocientos metros entre la ida y la vuelta y la verdad es que nos entusiasmó. Caminando entre montañas y paralelo al río, el paseo es muy agradable y, a cada paso que das, el paisaje te invita a parar par admirar su belleza y dejarla plasmada en las fotos que os invito a ver.
Por cierto, el otro día se cumplieron las 10.000 visitas al blog. Esto ha sido posible gracias a vosotros, mis lectores asiduos y otros muchos esporádicos de diversos países del mundo.
Gracias una vez más.
Saludos.
Antonio R.
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